¿Por qué muchos hombres acaban enamorándose de una chica de compañía?

¿Por qué muchos hombres acaban enamorándose de una chica de compañía?

El amor sigue siendo hoy en día tan misterioso como lo era al principio de los tiempos, cuando tantos y tantos autores se enfrentaron a la difícil tarea de explicarlo, expresarlo o entenderlo. De hecho, pensamos que el amor es un concepto original y totalmente objetivo, cuando en realidad han existido muchos tipos de amores a lo largo de la historia. Entenderlo depende de nosotros mismos, de nuestras experiencias y de nuestro bagaje cultural. El amor en la India no significa lo mismo que en España, o que en Afganistan. Especialmente si nos ponemos a hablar de relaciones amorosas, donde muchos confunden amor romántico con verdadero amor. En nuestra sociedad occidental se ha tendido a confundir esos dos términos hasta que el amor romántico, que puede llegar a ser muy tóxico, ha fagocitado a cualquier otro tipo de amor que podamos sentir.

Los tiempos están cambiando, y por fortuna hoy en día es más fácil encontrar a gente que rechaza esa imagen idealizada y totalmente falsa del amor romántico. Prefieren entenderlo a su manera, crearse su propia visión del amor, según lo que han podido experimentar y lo que desean. No aspirar al príncipe azul o a la chica perfecta, sino a alguien real que les ayude a disfrutar de una vida sana y en compañía. Se puede decir, por tanto, que hay tantas maneras de entender el amor como personas en este mundo. Esto hace que cada uno tenga su propia idea sobre lo que quiere y necesita, pero a veces lo confundan con otros deseos, con otros sentimientos. Se da la extraña aunque por otro lado lógica circunstancia de que muchos hombres que contratan los servicios sexuales de una prostituta terminan enamorándose de ella. El trabajo de una meretriz tiene, en principio, poco de romántico, pero eso no impide que muchos hombres vean en ellas a mujeres perfectas para tener una relación más formal. ¿Por qué ocurre esto?

Lo que un cliente encuentra en una acompañante

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Evidentemente, cada hombre busca algo diferente en una amante de este tipo, porque las prioridades de cada uno de nosotros son distintas. Sin embargo, según los propios testimonios de los clientes habituales y de las prostitutas, la mayoría buscan cariño y atención. Tal vez porque no lo encuentran en sus relaciones, si es que están casados. O tal vez porque están solteros y necesitan ese chute de cariño que solo una amante de lujo les puede ofrecer. Hay de todo, por supuesto, pero las acompañantes son expertas en hacer sentir bien a los hombres. No solo a través del sexo, sino también a través de su atención, funcionando a veces como psicólogas más que como amantes sexuales. El cliente, por supuesto, llega a conectar de una manera especial con esa mujer que le ha permitido abrir su corazón y que no le juzga, sino que le da todo lo que necesita. Así que es normal que muchos acaben enamorados.

Más del 20% de los clientes acaban enamorándose

Según un estudio publicado hace algunos años, aproximadamente un 22% de los clientes que visitaban habitualmente a una prostituta terminaban enamorándose de ella. Es una cifra sorprendente, desde luego, porque en un principio, este tipo de encuentros solo tienen un fin sexual, y ni mucho menos romántico. Sin embargo, los datos están ahí, y son corroborados por las propias profesionales. Casi todas ellas han encontrado a un cliente que se he enamorado, que ha intentado ir más allá del simple polvo pagado. Evidentemente, muchos de ellos no lo reconocerían, porque a pesar de consumir este tipo de servicios, hay algo de vergonzoso en acudir a una prostituta, más cuando te enamoras de ella. ¿Hay sentimientos reales, o es un simple espejismo que el hombre siente al tener un contacto tan íntimo con estas chicas? El estudio sugiere que la mayoría de hombres que terminan enamorándose de una acompañante suelen tener problemas afectivos en su vida habitual.

Muchos de ellos son hombres casados

Esto sorprende aun más cuando sabemos que la mayoría de hombres que acaban enamorándose de una escort están casados. A estas alturas no vamos a escandalizarnos al saber que los casados y los hombres con pareja son el grupo más nutrido entre aquellos que acuden a disfrutar del sexo de pago. Es algo que muchos desconocen, pero que se da cada vez más. Esos hombres buscan en las acompañantes sexuales algo que no tienen en sus relaciones de pareja. Y no nos referimos solo al sexo, sino también a la atención, al afecto, a tener a una mujer a tu lado que sabes que te va a escuchar. Lo hace por dinero, claro está, pero eso es un detalle que estos clientes suelen terminar pasando por alto. El amor, como muchas veces se dice, puede llegar a cegarnos, y empezar a equivocar sentimientos y emociones hacia otras personas.

¿Es recomendable iniciar una relación con un cliente?

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Como apuntábamos antes, son muchas las prostitutas que han tenido que enfrentarse a esta situación, que es bastante delicada, por supuesto. Estas mujeres se involucran en este tipo de servicios como algo sencillo y simplemente placentero. Deben aprender a separar los sentimientos de su trabajo, ya que de lo contrario estarían exponiéndose demasiado y podría ser peligroso. Con los clientes debía pasar exactamente igual, aunque en muchos casos ellos terminan dejándose llevar por las emociones. El contacto físico, el afecto que estas mujeres les brindan, se convierte en una necesidad que les lleva a involucrarse no solo física, sino también emocionalmente con estas chicas. Hombres casados, maduros o más jóvenes, que les plantean, después de varios servicios, comenzar una relación más seria, al haberse enamorado de ellas.

Cuando esto ocurre, la chica se ve frente a una situación complicada. Y es que puede ser un buen cliente el que nos diga esto, alguien a quien incluso le hemos llegado a coger cierto cariño, porque esas cosas pasan. Sin embargo, mantener una relación con él puede ser algo desastroso en muchos sentidos, especialmente si queremos seguir con  nuestro trabajo. ¿Aceptaría ese hombre que siguiéramos ejerciendo como prostitutas si estuviéramos con él? ¿No sería presa de los celos al ver cómo otros hombres contratan nuestros servicios? Dejarlo todo para estar con un cliente puede ser una alternativa, pero como ya sabrás a estas alturas, el amor puede durar toda una vida o apenas unos meses. Arriesgar nuestra carrera y lo que hemos conseguido por algo así puede ser complicado. La decisión, igualmente, la debe tomar cada chica por su cuenta.